lunes, 29 de septiembre de 2014

La Batalla de Salamina, griegos contra persas

Hoy, 29 de septiembre de 2014, se cumplen 2494 años de una de las batallas navales más decisivas de todos los tiempos, la Batalla de Salamina.

Batalla de Salamina, vista general

Diez años antes el Gran Rey de Persia, Dario I, había ordenado una expedición contra Atenas, la I Guerra Médica. La expedición fue un desastre que se saldo con una gran derrota en la famosa batalla de Maratón.

Expansión del Imperio Persa entre mediados del siglo VI y principios del siglo V A.C.

Tras el fracaso Dario I proyecto una expedición a mucha mayor escala utilizando todos los recursos de su imperio, el más extenso del mundo en aquella época. Sin embargo no vivió lo suficiente para cumplir su sueño por lo que fue su hijo y heredero Jerjes quien se encargo de llevarlo a cabo.

El objetivo principal de la expedición era castigar a Atenas por su "insolencia", aunque el fin último era la conquista y dominación de toda Grecia, la II Guerra Médica.

Atenas en el siglo V A.C.

Los preparativos para la expedición fueron minuciosos, cada pueblo del imperio debía aportar soldados o buques. En total se reunieron cerca de 200.000 guerreros y más de un millar de naves de guerra y otras tantas de transporte. Se construyo un puente sobre barcos para cruzar el Helesponto y un canal en el istmo de la Península del Monte Athos para evitar las tormentas que solían producirse al rodear la península.

Mapa de las campañas efectuadas durante las Guerras Médicas

Los griegos pensaron en obstaculizar el avance de los persas en el paso de las Termoplias con un pequeño ejercito cuyo núcleo eran los 300 espartanos conducidos por el Rey Leonidas. Al mismo tiempo la flota griega detendría a la flota persa en el Cabo Artemisio, un estrecho entre el continente y la Isla de Eubea. Sin embargo tras dos días de heroica resistencia los espartanos fueron aniquilados.

El Rey Leonidas al frente de sus 300 guerreros espartanos

Los persas llegaron hasta Atenas, la población fue evacuada a la Isla de Salamina donde la flota griega tenía su cuartel general. Hubo discrepancias en el mando pues Temistocles quería atraer a la flota persa hacía el estrecho que hay entre el continente y la isla en donde la superioridad numérica de los persas no serviría de gran cosa pues no tendrían espacio para maniobrar. En cambio los espartanos querían retirarse al Peloponeso defendiendo el Istmo de Corinto que estaban fortificando a toda prisa. El final se impuso Temistocles, la batalla se produciría en Salamina.

Plano de la Batalla de Salamina

Mediante argucias Temistocles convenció a los Persas de que atacaran precisamente en ese estrecho paso. La batalla se produjo el 29 de septiembre del año 480 A.C.

La flota griega se dirige a combatir a la flota persa

La flota griega, la mayor parte de la cual era ateniense, era muy inferior en número a la persa, compuesta principalmente por navíos fenicios y de las ciudades griegas de Asia Menor. Los griegos disponían de 370 trieras o en latín trirremes, los persas contaban con cerca de 1.200.

Una nave griega a punto de embestir y abordar a una nave persa

La táctica habitual en aquellos tiempos era dirigirse hacía la nave enemiga y golpearla con el espolón de bronce para hundirla, otra opción era abordarla. Tanto en un caso como en el otro los griegos tenían ventaja, sus naves eran más robustas, y los guerreros estaban protegidos por corazas y yelmos de bronce.

Los griegos abordando una nave persa

La derrota de los persas fue espectacular, perdieron entre 300 y 400 naves, las perdidas griegas fueron cinco veces menores. Tras la batalla los persas perdieron el dominio del mar, al mismo tiempo se produjo una sublevación en las ciudades griegas de Asía Menor. El Gran Rey Jerjes marcho con una tercera parte del ejercito a aplastar la sublevación, otra tercera parte se quedo para custodiar las líneas de comunicación, el otro tercio se quedo en Grecia al mando de Mardonio, el mejor de sus generales. Al año siguiente los griegos reunieron su ejercito, unos 30.000 soldados de infantería pesada y se enfrentaron a los persas, cuyo número era aproximadamente el doble, en la Batalla de Platea.

Batalla de Platea

Los persas sufrieron otra gran derrota. Las consecuencias de la derrota Persa en la II Guerra Médica fueron decisivas para el curso posterior de la historia. De haber perdido los griegos la naciente democracia griega habría quedado truncada. Los persas podrían haber seguido expandiéndose hacia el oeste y tal vez conquistado Italia acabando con la recién nacida República de Roma. Tal vez ahora todo occidente hablaría algún dialecto del persa en lugar de dialectos del latín o del germano.

Dejo tres interesantes enlaces.

El primero es un buen artículo en donde podréis encontrar más información acerca de esta batalla decisiva.

El segundo es un muy interesante documental de unos 25 minutos de duración sobre esta batalla.
Batalla de Salamina, documental

El tercero es para descargar en PDF la magnifica novela histórica de Javier Negrete "Salamina". Es un excelente escritor que se ha especializado en la antigüedad clásica, algo que le apasiona, este relato es un buen ejemplo de ello.



Tengo tres de sus obras. La interesante novela ucrónica "Alejandro y las águilas de Roma", en ella especula en lo que podría haber sucedido si Alejandro no hubiera muerto en Babilonia y hubiera cumplido sus planes de expandirse hacia el Oeste enfrentándose con la República de Roma. También tengo dos de sus ensayos históricos: "Roma victoriosa" y "Roma invicta", en ellos narra la historia de Roma desde su fundación hasta el fin de la república, muy recomendables para todo aquel que esté interesado en la historia de la antigua Roma, escritos con un lenguaje asequible.

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